Pensada como un centro comercial sobre la gran vía del norte, la galería Bond Street nació en 1963 y su construcción superó los estándares de la época porque incluyó las novedosas escaleras mecánicas, barandas de bronce y pisos de mármol para captar a la clase alta.

La década del 60 fue su etapa más gloriosa y, después de la dictadura militar en Argentina, empezaron a convivir en ella distintas culturas y filosofías de vida, lo que la convirtió en un centro de congregación de distintos tipos de artistas plásticos, diseñadores, pintores y algún que otro refugiado. Ese perfil cultural que en ese entonces nacía nunca más se perdió en la Ciudad.

“La Bond” es una galería de tres pisos llena de locales únicos en Buenos Aires. No es una galería lujosa. Es más bien un espacio que se quedó en el tiempo. Pero sus paredes son verdaderas piezas de arte urbano y guardan secretos de otros tiempos.

En la Galería Bond Street están los tatuadores más expertos del país y es por eso que la gente acude a tatuarse de todos lados. Uno de los locales más concurridos es American Tattoo, elegido por grandes personalidades nacionales e internacionales (deportistas, cantantes, actores, modelos, etc.) como Diego Maradona, Andrés Calamaro, Fabricio Oberto, Marcelo Tinelli y los músicos de Die Toten Hosen, entre otros.

Exclusiva y original indumentaria, como zapatillas, gorras, remeras, buzos, jeans, camperas y otras prendas de diseñadores independientes nacionales y extranjeros invaden sus coloridas vidrieras. También hay locales exclusivos con lo mejor del comic mundial donde se venden números únicos, ediciones limitadas, figuras de acción, máscaras y coleccionables.

Hay locales exclusivos para skaters y bikers con tablas, bicis, indumentaria y accesorios.

Y para los amantes de la música, "la Bond" tiene absolutamente de todo.

 

Fotos: galeriabondstreet.com.ar