La razón de ser de 758 Bar, ubicado cerca del barrio coreano en Flores, es que en el mundo de hoy hay muchos lugares para ir a pasar un momento, pero solo unos pocos para experimentar un deleite pleno en cuerpo y alma. Y que además, todos tenemos muchos amigos y conocidos, pero pocos amigos verdaderos para compartir gratos y placenteros momentos. Por todo ello, han creado un lugar exclusivo en el medio de los muchos lugares, para aquellos que quieran estar con sus queridos.

Su ambiente es entretenido, con mucho color y buena onda.
Reposa sobre una casa reacondicionada para funcionar como bar, donde se destacan elementos rústicos (como sus paredes en ladrillo visto), y objetos antiguos que forman parte de su decoración. Además, el mobiliario es una combinación de estilos y épocas.

La cocina de 758 Bar muestra opciones variadas, con atención en las carnes, y en los pescados y mariscos y un poco de la exquisita culinaria coreana. Hay presentaciones de tapeo como sus gambas al ajillo, brusquetas, tempura de langostinos, wings, fiambres y ceviche; y una gran y sabrosa carta de cocktails, tragos largos y licuados para acompañar cada elección gastronómica.