Con una extensión de más de un kilómetro y medio, la calle Thames ofrece una amplia variedad de expresiones culturales y gastronómicas, además de diversos atractivos arquitectónicos y turísticos. En su amplio recorrido se puede encontrar un sinfín de locales de comida, indumentaria, zapatos, decoración y electrodomésticos. Además, posee uno de los circuitos gastronómicos más importantes, con bares y restaurantes que combinan diseño y cocina de alta calidad nacional e internacional.
Si hay un lugar que refleja el espíritu de la calle Thames, ese es Mercat: un mercado gourmet con 27 locales que se convirtió en punto de encuentro de cocineros, amantes de la comida y vecinos que buscan adquirir y degustar delicias de distintas partes del mundo. Fuera de Mercat las culturas también conviven en total armonía. Quien tenga antojo de comida armenia podrá detenerse en Sarkis, un bodegón con platos abundantes entre los que se destacan las ensaladas de tabulé, el keppe frito y el arroz pilaf. ¿Ganas de tacos o churros? Juan Pedro Caballero es el lugar indicado. ¿Un capricho local? entonces no hay como Chori, una choripanería al paso. Y para esos días donde uno no sabe bien qué quiere, Las Pizarras: un pequeño bistró sin carta donde el menú del día, preparado con alimentos de estación, se exhibe en las pequeñas pizarras que decoran el lugar. Ahora bien, si las ganas son de beber, la cita obligada es en el bar Tres Monos, donde hacen unos tragos de autor de altísimo nivel que lo posicionan como uno de los mejores bares del mundo.
Thames fue destacada por la revista británica Time Out, que elaboró una lista con las 30 calles más cool a partir de las opiniones de los residentes de cada ciudad mediante una encuesta global. Lo que cautiva de Thames es su diversidad, estilo y oferta gastronómica innovadora y de alto nivel, que constituye el principal atractivo para quienes la visitan.
