De más está decirlo: el fuerte del bar son los tragos y, en especial, los “ready to drink”, pensados para llevar y tomar en casa. La carta incluye clásicos reversionados como el “Negroni Escándalo” o el “Gin Tonic” y también otros más osados y originales como “Algo Frutal” (ginebra El Profeta, Legui, naranja, granada y maracuyá), o “Dame un Tiki (ron, Hesperidina, ananá, maní, apio y Fernet).
Los platos son simples, pero con un toque sofisticado. Desde sandwiches de lomito y panchos (súper grandes y rellenos de rúcula, panceta y queso) hasta pascualina de kale y almendras o Tartar de ternera con jalapeños, hay opciones para todos los gustos y costumbres. Los más diurnos también pueden ir a Tres Monos a la tarde a disfrutar de su exquisito servicio de cafetería y pastelería.
Con su fachada sobria y elegante y una ambientación divertida y armoniosa, Tres Monos es más que un bar: es un concepto que formó una comunidad. Es que también tiene una consultora que ofrece asesoramiento a marcas y empresas del sector y una escuela para bartenders y consumidores de todo el país que funciona en el piso de arriba del local y con modalidad remota.
Fotos:
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