Una inquietante propuesta de cocina italiana. Eso es Baccano Restó, en pleno barrio de Núñez. El ambiente resulta cálido y acogedor, presenta una iluminación baja que predispone a la intimidad. La cocina es obra de su chef Hugo Fanega, de la cual debemos hacer una parada exclusiva en los ravioles negros rellenos de salmón rosado o los ravioles verdes rellenos de espinaca. Obviamente, las pastas es quizás la perla del lugar, por lo que también son exquisitos los sorrentinos de muzzarella y jamón o los fusiles al fierrito. Para terminar el viaje, hay tres recomendados: flan casero, mouse de chocolate o el tiramisú. Tres clásicos que no defraudan.